Phoridae

Las moscas fóridas son diminutas o pequeñas, con una longitud de entre 0.016 y 0.25 pulgadas. Vistas de lado, se puede observar una joroba pronunciada en el tórax. Sus colores varían, siendo usualmente negras o marrones, y más raramente amarillas, naranjas, gris pálido o blanco pálido. La cabeza suele ser redondeada y en algunas especies se estrecha hacia el vértice, el cual es plano. En algunas especies, el callo ocelar está hinchado y muy elevado por encima de la superficie del vértice. Los ojos son dicópticos tanto en machos como en hembras (los ojos de los machos están juntos, los de las hembras están separados). El tercer segmento de la antena es grande y redondeado o alargado, y lleva una arista larga apical o dorsal dirigida hacia los lados. La arista es glabra o plumosa. La larva es pequeña, rara vez mide más de 10.0 mm de largo y típicamente tiene 12 segmentos visibles. La forma varía de fusiforme con proyecciones poco visibles en los segmentos posteriores a corta, ancha y aplanada con proyecciones plumosas dorsales y laterales, especialmente en el segmento terminal. El color es blanquecino, blanco amarillento o gris. El primer estadio es metaneústico, los estadios posteriores son anfineústicos.